Todo el mundo dice que el SEO es cada vez más complicado, que Google está adaptando el algoritmo para que las empresas no se posicionen de forma natural y se vean obligadas a invertir en Adwords.

La verdad es que Google no para de hacer cambios en el algoritmo y en su política de penalizaciones, en ciertas ocasiones es para mejorar la experiencia de uso en el buscador y sólo persiguen mostrar los resultados de aquello que realmente buscaba el cliente, pero también vemos directrices de compañía y ponderaciones de los resultados de ciertas webs frente a otros, que responden exclusivamente a motivos económicos, por mucho que lo quieran justificar.

Pero aunque el SEO es cada día más complejo, y ya sólo está al alcance de los buenos profesionales, en realidad, no ha cambiado tanto en su esencia. Las claves de un buen posicionamiento siguen siendo las mismas 3:

SEO basics

 Arquitectura

Todo proyecto SEO debe iniciarse con un buen trabajo de keywords research, es ahí donde se analiza la competencia y se decide la estrategia de palabras clave que vamos a seguir. La arquitectura de la web debe ir alineada con esa estrategia de keywords. Y todo sin perder una coherencia desde el punto de vista de user experience y desde la visión de comunicación.

Contenidos

Hay dos motivos por los que los contenidos son importantes, uno son los contenidos de las landings a posicionar. Debemos diseñar muy bien los textos que leerá Google que estarán dentro de esa arquitectura que hemos diseñado adaptada a nuestra estrategia de keywords.

Y por otro lado los contenidos de calidad que nos ayudarán a conseguir autoridad. Buenos artículos, informes, estadísticas, e-books, videos, infografías, herramientas… hemos de crear contenidos que realmente sean interesantes para los usuarios y que tengan también suficiente interés para los medios.

Autoridad

La autoridad se gana, no se compra, pero con presupuesto se pueden hacer más y mejores cosas. Está claro que si creamos todos esos buenos contenidos que decíamos en el punto anterior sólo necesitaremos un poco de difusión en redes sociales para que tenga cierta viralidad, pero no siempre es todo tan bonito.

Cuando se empieza, en la mayoría de ocasiones debemos plantear una campaña de inbound marketing para hacer que los contenidos tengan visibilidad real. Debemos llegar a acuerdos con influencers para que nos mencionen en sus blogs y en sus perfiles sociales. Debemos escribir para ellos, adaptar nuestro contenido a su audiencia, pensar en formas de colaborar donde todos ganemos algo.

Estas son las verdaderas 3 claves del SEO, sobre el papel no parecen tan complicadas, es su ejecución la que determina el éxito de las mismas. Pero tampoco nos engañemos, no todos los servicios tienen interés para los medios, no todos los productos son sociales, no todas las empresas son capaces de generar contenido original y con gancho (engagement, lo llaman ahora).

El SEO es cada vez más complicado y, en un escenario así, es imposible garantizar unos objetivos. Pero con un trabajo bien pensado, bien hecho y contante, los resultados llegan y duran mucho tiempo.