Cuando en Thatzad hacemos campañas multicanal siempre medimos el rendimiento de cada uno de ellos. A lo largo de la campaña vamos viendo el ROI de las acciones hechas en Facebook, de las campañas display, de remarketing, mail, post patrocinados,… En base a esos números decidimos dónde invertir más y dónde menos.

En el 90% de las campañas que hemos realizado, el tráfico de buscadores siempre es el de mejor calidad, el que aporta un ROI más alto, ¿cuál es el motivo? Que es el único que no es intrusivo, que es el cliente final el que tiene una necesidad y nos busca a nosotros. Por lo tanto, la predisposición a cerrar la venta o generar un lead es mucho más alta que en el resto de canales.

¿Qué casos son ese 10% donde las ventas no vienen de los buscadores? Aquellos negocios que no se conocen, qué aún no son capaces de generar una demanda. En esos casos, el primer paso es crear la necesidad así que deben explorarse otros canales como el marketing de contenidos.

Primero, entendamos qué es el SEO:

Search Engine Optimization (SEO) es un conjunto de técnicas y acciones usadas para mejorar el posicionamiento de un sitio web en los diferentes motores de búsqueda como Google, Yahoo!, Bing o Yandex. El SEO posiciona una página web de manera orgánica y a largo plazo, sin pago directamente al motor de búsqueda.

Aunque los buscadores son más sofisticados e inteligentes cada día, aún no pueden ver uns web igual que lo hacemos los humanos, así que el SEO ayuda a los motores de búsqueda a entender sobre qué trata cada página y si es útil o no para el público.

¿Y por dónde se empieza?

El SEO se compone de dos partes íntimamente relacionadas:

• La primera depende directamente de nosotros. Se basa en tener una estructura de contenidos web alineada con la estrategia de keywords. Se les llama parámetros Onsite.

• La segunda parte es un tanto más compleja ya que depende de que otras webs hablen de nosotros. Se basa en generar contenido interesante y conseguir links de calidad que apunten a nuestra web. Se les llama parámetros Offsite.

Pero todo ello puede tener un efecto nulo si nos equivocamos en la estrategia. Hemos de analizar las keywords, ver qué cómo trabaja la competencia, qué buscan nuestros clientes potenciales, analizar nuestras fortalezas y debilidades respecto a los competidores para estimar si los resultados pueden llegar a medio o largo plazo y si requiere más o menos esfuerzo e inversión.

“Google, Bing u otros buscadores son la principal puerta a internet, son las herramientas que utilizamos para encontrar información, productos o servicios online. Cualquier negocio que tenga en mente una estrategia a largo plazo en Internet, debe incluir el SEO en esa estrategia. Es una forma barata a largo plazo de recibir visitas de gran calidad, ser líderes en Google también envía un mensaje a los clientes y competidores.” comenta Edmundo Montaño, Director General de Carmudi.

Google mantiene en constante actualización una Guía de iniciación en SEO, son algunos consejos muy básicos pero veraces, así que antes de dejarse llevar por cantos de sirena y fórmulas mágicas que nos garantizan las primeras posiciones en muy poco tiempo, os recomendamos, leeros esta guía e ir implementando todas sus recomendaciones.